Visita al Museo Argentino de
Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia”
El día miércoles 31 de octubre asistí al Museo
Argentino de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia”. Éste está ubicado
dentro del Parque Centenario, en el barrio de Caballito precisamente en la
calle Av. Ángel Gallardo 490.
Está abierto todos los días (excepto algunos
feriados) de 14 a 19 hs. El precio de la entrada es de $50 y los menores de 6
años entran gratis.
El Museo Argentino de Ciencias Naturales
“Bernardino Rivadavia” es un ámbito único por historia y patrimonio. Integra a
la investigación, la conservación, la exhibición y la educación para que toda
la comunidad pueda comprender y valorar la naturaleza, sus procesos y el rol
del hombre como parte de este complejo sistema.
A través de las exhibiciones se puede conocer la diversidad biológica,
haciendo énfasis en
nuestro territorio, con la visión de generar mayor interés en la ciencia y una conciencia ambiental en los visitantes.
Desde su creación en 1812, por inspiración de Bernardino Rivadavia, la colección del museo se alojó sucesivamente en las celdas altas del Convento de Santo Domingo, en la Manzana de las Luces y algunos edificios de la plazoleta de Montserrat, hasta instalarse definitivamente en 1937, en el edificio actual.
Aún hoy, es uno de los pocos Museos argentinos que fue concebido para resguardar y exhibir colecciones.
Actualmente posee numerosas muestras que exhiben mineral conservado de ejemplares representativos de la fauna, flora, paleontología y geología de nuestro país y del mundo.
El museo fomenta el interés por la ciencia y el desarrollo de una conciencia ambiental, el visitante a través de su experiencia previa y visita a dicho museo, puede asumir un rol activo participando de las ofertas educativas construyendo su propio conocimiento. El museo de Ciencias Naturales cuenta con un edificio dividido en diferentes salas, al ingresar me dieron un plano con los nombres de las mismas.
En la parte de la planta baja me encontré con la sala de Geología allí había distintos tipos de minarles con sus localizaciones, usos en la humanidad, la historia de la Tierra y algunos meteoritos hallados en Argentina. Luego pase a la sala que era el Acuario donde había una variada colección de peces autóctonos de agua dulce y salada. Cada pecera tenía la información de los peces. Allí no se podía sacar fotos con o sin flash ya que podían dañar a los peces. La otra sala que le seguía era la Histórica donde se exhiben muebles y objetos que fueron parte de su historia y carteles con información. A su izquierda me encontré con la sala de Malacología que contiene una gran compilación de moluscos autóctonos de agua dulce, salada y terrestre, con grandes infografías y explicaciones sobre los distintos usos que les da el hombre. Al ingresar allí me impactó la cantidad de moluscos y como estaban organizados perfectamente con sus respectivos nombres. Después estaba la sala Diorama del Mar había reproducciones de especies que habitan en el mar Argentino y sus alrededores.
Este museo cuenta con un sector de descanso el cual es llamado bar temático pude observar que es recientemente inaugurado allí los visitantes pueden tomarse un descanso antes de continuar su recorridos y también pude observar calcos de tamaño real de grandes peces como el tiburón peregrino además de grandes rayas. Siguiendo mi recorrido por el museo me encontré con la sala de Paleontología, era inmensa!!! Me encantó, las replicas exhibidas eran muy grandes, me sentía una niña pequeña dentro de esa sala con cara de sorprendida. Es una sala muy importante en cuanto a la cantidad y calidad del material original y las replicas exhibidas como las reproducción del Patagosaurus, el Piatnitzkysaurus, el Amargasaurus, el Carnotaurus, el Herrerasaurus y el Eoraptor por supuesto que estos nombres me los anoté en el celular ya que eran muy difíciles de recordarlos. Llegando casi al final del recorrido pasé por la sala Antártica que cuenta con especímenes disecados de gran cantidad de animales de la Antártida, tales como equinodermos, aves, peces, mamíferos acuáticos y un gran cráneo de cachalote. Finalizando el recorrido de planta baja en la sala de Cuaternario pude encontrarme con esqueletos montados con partes originales y replicas de los animases que habitaron la Argentina luego de la extinción de los dinosaurios.
Al terminar de recorrer la planta baja me dirigí hacia una escalera que me llevaba a la planta alta donde también seguían diferentes salas tales como: la sala de Mamíferos Africanos en el cual se encontraban animales embalsamados como leones, papiones, cada uno de los animales tenía información sobre la alimentación, estrategia de defensa, organización social, etc. Luego le seguía la sala de Osteología Comparada allí se podía observar las distintas maneras en que la evolución, a través de los huesos y cartílagos, ha permitido a los animales adaptarse a su medio. Después estaba la sala de Anfibios y Reptiles mediante infografías, ejemplares conservados y calcos se podía apreciar la gran variedad de sapos, ranas, tortugas, lagarto, yacarés y serpientes que habitan la Argentina con vitrinas que muestran las adaptaciones de estos animales a diversos modos de vida. Ya casi terminando el recorrido me dirigí a la sala de Aves, era inmensa, se podía apreciar de manera ordenada las 230 especies en una vitrina, con información de cada una de las familias presentes en Argentina. Y también tenían algunas vitrinas botones para poder escuchar los diferentes sonidos de las especies. Le seguía allí la sala de Artrópodos comprendía una colección de variados especímenes de ciempiés, insectos, aracnicidos (el cual me daba mucha fobia verlo ya que les tengo miedo) y crustáceos con grandes infografías que explican los sistemas de órganos de estos animales y su relación con el hombre en la ecología. Y finalmente termine mi recorrido en la sala de Mamíferos actuales habían grandes esqueletos de ballenas, focas y monos embalsamados, eran algunos de los animales que podían observarse en esta sala acompañados de completas explicaciones en infografías y ambientaciones y dioramas mostrando los mamíferos en su entorno natural.
Estuvo muy bueno el recorrido del museo, me pareció muy interesante para llevar a los chicos ya que ofrece variados recorridos temáticos acordes a cada nivel de la enseñanza articulados con el diseño curricular. También para que genere un aprendizaje significativo el museo ofrece recursos didácticos para grupos escolares los cuales se pueden trabajar antes o después de la visita al museo.
Rescato la manera organizada en que estaba el museo, las grandes infografías con las explicaciones de cada sector, cada animal y exhibición que tenia cada sala. Las actividades están orientadas a fijar conceptos, indagar sobre la naturaleza y motivar actitudes positivas hacia el medio ambiente y nuestro patrimonio cultural.
